Este es solo un poquito de lo que ha sido el nuevo capítulo de la historia. Si quieren disfrutarlo completo dar "Click" al link.
Me levante de su lado y tome mi móvil, eran las 10 de la
mañana. Le di un beso en la frente y me metí al baño para darme una ducha antes
de comenzar a hacer el desayuno del día. Me quite lo que traía puesto y encendí
la llave. El agua comenzaba a caer por todo mi cuerpo, estaba tan tibia que era
sumamente relajante. Cerré la llave, tome la toalla y me la puse. Al salir del
baño me di cuenta que Marc aún seguía profundamente dormido. Sin hacer alguna
clase de ruido me acerque al closet y comencé a buscar lo que me pondría. De
tanto buscar resulte escogiendo un short corto blanco, una blusa un poco holgada
negra y un par de Converse. Me quite la toalla y me puse lo que había escogido.
Me acerque al espejo y me recogí el cabello, no quería tener un problema con él
así que fue la mejor decisión que pude tomar. Recogí lo que había dejado tirado
y luego salí de la habitación.
Baje las escaleras y entre a la cocina, saque todo lo
necesario para el desayuno y puse manos a la obra. En verdad me gusta cocinar,
creo que lo traigo de mi madre porque ella le gusta tanto como a mí. Estaba a
la mitad de acabar cuando entro Marc con su gran y hermosa sonrisa dibujada en
su rostro. Su sonrisa es la más hermosa que puede existir en este mundo y no lo
digo porque lo ame, lo digo porque así es. ¿O miento? creo que ustedes saben
que no lo hago.
Marc: ¡Buenos días mi pequeña! —Se acercó a mí y me beso.
Yo: Buenos días campeón. —Conteste. —Pensé que aun seguías
dormido, quería hacer el desayuno y subírtelo; pero veo que ya no podrá ser por
el día de hoy. —Explicaba mientras seguía en lo mío.
Marc: ¿Qué te parece si mejor te ayudo? —Pregunto.
Yo: Y a ti, ¿quién te dijo que no me ayudarías? —Pregunte. —Si
no lo haces te quedas sin desayunar papacito. —Guiñándole el ojo.
Marc: Que mala eres pequeña. —Dijo, sonriendo.
Yo: Mala no, loca tal vez campeón. —Me di la vuelta y le tire un beso.
Marc: Tienes razón, estás loca. —Contesto, riendo.
Yo: ¡Malo! —Le dije y me volví a dar la vuelta. —Aunque
creo que no eres tan malo. —Se acercó a mí, me abrazo por atrás y me pregunto susurrándome
al oído.
Marc: ¿Recuerdas que lo mismo estábamos haciendo cuando
estuvimos a punto de besarnos por primera vez? —Dijo.
Yo: ¿Cómo olvidar ese momento Marc? —Pregunte. —Lo tengo tan presente
como cada momento que hemos vivido juntos. Son cosas que jamás las olvidaré. —Dije
sonriendo y con toqué de melancolía.
Marc: Y aún tenemos que vivir muchas cosas mi pequeña. Serán
cosas inolvidables, serán cosas que nadie se imagina. —Me dijo al oído.
Yo: Tienes razón cariño, aún nos hacen falta muchas cosas
por vivir y eso me hace emocionarme. —Le dije mientras acariciaba su mano que rodeaba
parte de mí.